Ayer 7 de
julio el ejército de la entidad sionista inicio un nuevo ataque contra el
pueblo de Gaza.
Tras unas semanas
de tensión después del secuestro de 3 colonos ocupantes de los asentamientos
ilegales en territorio palestino, alguno de ellos perteneciente además al
ejercito sionista, y el posterior descubrimiento de su asesinato, los sionistas
lanzan una nueva operación de castigo colectivo a un pueblo que ya sufre de por
si un genocidio lento y continuado con ataques constantes contra su población y
su infraestructura.
Además, en los días posteriores a la aparición de los 3 colonos, también se dieron varios actos de terrorismo por parte de colonos y civiles ultra-ortodoxos protegidos por el ejercito sionista, en los que fallecieron varios menores de edad palestinos, uno de ellos torturado y quemado vivo en una nueva muestra de crueldad y fanatismo del sionismo, que es promocionado y amparado por la entidad sionista.
Estas nuevas muertes se suman a la ya larga lista de víctimas que tienen su origen en los efectos del colonialismo y el imperialismo, como sistemas políticos basados en la ocupación, la rapiña y la explotación del hombre por el hombre.
Fue la Nakba, es decir, la ocupación militar israelí la que ha provocado hasta entre 5 a 7 millones de refugiados así como cientos de miles de muertos, tanto en operaciones militares, masacres y exterminios planificados, ejecuciones selectivas, muertes bajo custodia por tortura, desapariciones forzadas, y muerte por hambre y enfermedades debido al asedio sistemático a poblaciones palestinas.
Es el sistema capitalista en su fase imperialista, el que produce guerras, ocupaciones y muerte en la búsqueda de reproducción de capitales, ocupación de recursos y mercados. Así, en el caso Palestino, la religión se instrumentaliza por un grupo de oligarcas que mantienen un estado ilegitimo, confesional que asume el “ser el pueblo elegido”, base argumental sobre la que se justifica la ocupación y continúa limpieza étnica del pueblo palestino, con apoyo del resto de potencias imperialistas.
Por todo esto, desde la Unión de Juventudes Comunistas de España:
- Denunciamos una vez más a la entidad sionista israelí como una entidad ilegitima bajo las normas del derecho internacional, que mantiene una ocupación ilegal contra el pueblo palestino, habitante histórico y único con derecho sobre su territorio.
- Exigimos el fin de la violencia por parte del ejército israelí, el fin de los asentamientos y sobretodo el fin de la ocupación.
- Resaltamos y defendemos la legítima resistencia del pueblo palestino, por los medios que sean necesarios.
- Nos comprometemos firmemente a la lucha internacionalista con el pueblo palestino, consecuentemente en las próximas semanas partirá una brigada de la UJCE y el Movimiento de Solidaridad Brigadista a Cisjordania, y en próximos meses una brigada hacia Gaza.
Además, en los días posteriores a la aparición de los 3 colonos, también se dieron varios actos de terrorismo por parte de colonos y civiles ultra-ortodoxos protegidos por el ejercito sionista, en los que fallecieron varios menores de edad palestinos, uno de ellos torturado y quemado vivo en una nueva muestra de crueldad y fanatismo del sionismo, que es promocionado y amparado por la entidad sionista.
Estas nuevas muertes se suman a la ya larga lista de víctimas que tienen su origen en los efectos del colonialismo y el imperialismo, como sistemas políticos basados en la ocupación, la rapiña y la explotación del hombre por el hombre.
Fue la Nakba, es decir, la ocupación militar israelí la que ha provocado hasta entre 5 a 7 millones de refugiados así como cientos de miles de muertos, tanto en operaciones militares, masacres y exterminios planificados, ejecuciones selectivas, muertes bajo custodia por tortura, desapariciones forzadas, y muerte por hambre y enfermedades debido al asedio sistemático a poblaciones palestinas.
Es el sistema capitalista en su fase imperialista, el que produce guerras, ocupaciones y muerte en la búsqueda de reproducción de capitales, ocupación de recursos y mercados. Así, en el caso Palestino, la religión se instrumentaliza por un grupo de oligarcas que mantienen un estado ilegitimo, confesional que asume el “ser el pueblo elegido”, base argumental sobre la que se justifica la ocupación y continúa limpieza étnica del pueblo palestino, con apoyo del resto de potencias imperialistas.
Por todo esto, desde la Unión de Juventudes Comunistas de España:
- Denunciamos una vez más a la entidad sionista israelí como una entidad ilegitima bajo las normas del derecho internacional, que mantiene una ocupación ilegal contra el pueblo palestino, habitante histórico y único con derecho sobre su territorio.
- Exigimos el fin de la violencia por parte del ejército israelí, el fin de los asentamientos y sobretodo el fin de la ocupación.
- Resaltamos y defendemos la legítima resistencia del pueblo palestino, por los medios que sean necesarios.
- Nos comprometemos firmemente a la lucha internacionalista con el pueblo palestino, consecuentemente en las próximas semanas partirá una brigada de la UJCE y el Movimiento de Solidaridad Brigadista a Cisjordania, y en próximos meses una brigada hacia Gaza.
0 comentarios:
Publicar un comentario